La obra que presentamos describe un proceso de modernización, el que se desarrolló en L¡bano desde finales del siglo XVIII y durante todo el XIX, hasta la Constitución de 1926, la primera constitución escrita de la República libanesa. El concepto de ÂômodernizaciónÂö es en s¡ complejo y articulado. Desde el punto de vista de la doctrina tradicional del Estado moderno europeo, la ÂômodernizaciónÂö consiste en la afirmación de un poder soberano y neutral. Un cap¡tulo importante de este acontecimiento consistió en la superación de las guerras de religión en Francia. Pues bien, este concepto de ÂômodernizaciónÂö no se adapta bien a L¡bano. Es cierto que la ÂômodernizaciónÂö, también en L¡bano, a partir de principios del siglo XIX con la dominación egipcia, se caracteriza por el concepto europeo de soberan¡a y por el correlativo de igualdad; es cierto que asistimos a un proceso de concentración de las funciones de imperium, de la fiscalidad, la jurisdicción y el poder de llamar a las armas. Sin embargo, dicho proceso no da lugar al proceso paralelo y consecuente de la pacificación: al contrario, la ÂômodernizaciónÂö en este caso viene acompa?ada por la ÂôconfesionalizaciónÂö y por el estallido de la violencia sectaria. La autora dice expresamente: Âôla confesionalización en L¡bano es un fenómeno intr¡nsecamente modernoÂö, en el sentido de que es moderna la tendencia de la opinión religiosa a convertirse en ÂôconfesiónÂö, y finalmente en comunidad pol¡tica dotada, precisamente en tanto confesión, de un proyecto pol¡tico y constitucional en el ámbito nacional. Un paso más allá y se llega a la violencia sectaria.
