El lenguaje, la imaginación y la memoria conforman la tríada del creador de ficciones, según Luis Mateo Díez. Hay en todas sus ficciones una profunda mirada al ser humano, a los personajes extraviados en el laberinto de la vida que pueblan las Ciudades de Sombra de sus fabulaciones, y se realiza desde una perspectiva surrealista o expresionista de la realidad. Prevalecen atmósferas oníricas, misteriosas e irreales, matizadas por un tono humorístico, grotesco o melancólico, que se sirve de la parodia o del absurdo para alcanzar su objetivo.
Invenciones y recuerdos reúne un conjunto representativo de su obra. Se inicia con una gavilla de historias enmarcadas en el ámbito de lo fantástico o lo insólito para dar paso, en segundo lugar, a evocaciones de variada factura que remiten a su mundo literario. Son veinte narraciones breves donde la hibridación es una característica muy destacada. Se combina el cuento y el ensayo en una misma pieza, incluso es difícil delimitar si se trata de uno u otro, y se suman a estos relatos otros anclados en la memoria de un tiempo pasado.
