Podemos vivir mucho más allá de las limitaciones que imponen el tiempo y el espacio, de lo que captan nuestros sentidos. Justo tras el velo de lo nunca antes visto existe un amor esencial que anhela que obtengamos todo aquello que deseamos de corazón. En ese espacio, el Universo conspira, literalmente, en nuestro nombre. Alinea jugadores y circunstancias de inimaginables maneras, dirigiendo hacia nosotros aquello en lo que nos concentramos y con lo que nos movemos. Cualquier deseo está garantizado y cualquier reto puede superarse cuando recordamos cómo funciona de verdad el mundo y quiénes somos nosotros. En este segundo libro de la trilogía Mensajes del Universo, Mike Dooley actúa de nuevo como un enlace del Universo, ofreciéndonos un recordatorio para ayudar al lector que se siente castigado por las circunstancias a sentirse feliz y a reír de nuevo en su camino a la iluminación.
